jueves, 28 de junio de 2012

*Os hablamos a vosotros, humanos, seres de luz. Alzaos de vuestro pasado encadenado a la traición y participad en vuestra labor creativa, en el despliegue de prodigios sin fin. Elevaos por encima de la actual cultura para recordar vuestra naturaleza y vuestro origen: cuerpos luminosos como estrellas con temperatura definida, que crean tiempo y espacio, pintando paisajes espaciales en la pantalla del tiempo y atrayendo polvo de estrellas con su luz danzarina.

Durante tres billones y medio de años, nosotros, los que procedemos de los dominios angélicos, hemos adaptado y mantenido con exactitud la temperatura
planetaria más adecuada para vuestro desarrollo y evolución. No debéis temer al cooperar con el Creador y con nosotros: estáis en buenas manos, protegidos por nuestro amor.

El miedo, que durante tanto tiempo os ha atenazado el corazón, os ha impedido comprender nuestro mensaje; sin embargo, ahora estáis preparados para recibirlo. Os ayudaremos a sintonizar la frecuencia del amor que curará al mundo enfermo y os atraerá hacia las Estrellas. Escuchad y sentid en vuestras palabras esa frecuencia en la que se revelan por siempre los designios del Eterno Creador.

Somos los alados del Cielo, guardianes espirituales de la Tierra, vuestro reflejo en el amor perfecto, la dimensión que os falta para alcanzar la plenitud. Acogednos en vuestra conciencia y recordad. Conoceos como lo que sois: verdadera y completamente humanos.

Amamos este planeta con un eterno fuego que necesita todas las miríadas de estrellas para revelarse, pero basta una sola palabra para decir a la Tierra: “Te amo tanto que te daré mi fuego en tus eras de hielo; te daré todo lo que soy hasta que juntos, demos fruto, hasta que engendremos toda una progenie que también será hija del ardiente amor de la luz estelar y de la suave verdad del mundo oceánico”.

Despierta, humanidad. Los maestros del amor giran en torno a la Estrella matutina, descienden en espiral, se detienen y desembarcan en la costa de tu historia. Batiendo las alas, penetran en tu conciencia.

Extraido de "La vuelta de Las Tribus Pájaro" (Ken Karey)




No hay comentarios:

Publicar un comentario